Consejos para una buena introducción

Escribir un trabajo para la universidad no es cosa sencilla, ya que debemos tener en mente las diferentes partes que lo componen y cada una de ellas tiene una composición específica, es decir, no puedes decir los resultados en la introducción ni dejar sin referencias el marco teórico.

Es por eso que hemos decidido hacer una serie de contenidos sobre las partes de los trabajos universitarios (estos valen para las tesis y los trabajos de grado), así podrás tenerlo un poco más claro y quizá te sirva de complemento para las materias de Metodología de la Investigación.

 

¿Cómo hacer una introducción de un trabajo?

 

1. Extensión de la introducción

 

¿Cuántas palabras debe tener una introducción? Esto depende mucho con el trabajo mismo, cuando se trata de una investigación de 20 páginas, una introducción de 1 o 2 páginas está bien. Incluso esa medida está bien si lo deseas llevar de manera consecuente:

• 20-25 páginas de desarrollo: 1-2 páginas de introducción.
• 40-50 páginas de desarrollo: 2-4 páginas de introducción.
• 60-100 páginas de desarrollo: 4-8 páginas de introducción.

Ojo, esta no es una regla. Por eso, si te preguntas: ¿cuántas líneas debe tener una introducción? Recuerda que lo anterior solo es una medida para que te hagas una idea, sin embargo, lo más importante es que puedas expresar claramente las ideas que den al lector un entendimiento claro sobre lo que trata la investigación y el cómo se desarrolló.

 

 

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2. Qué explicar y qué no

 

Cuando realizas la introducción es clave que sepas qué cosas debes decir y cuáles no, de esta manera puedes hacer correctamente cada sección del trabajo.

En la introducción lo primordial es desarrollar estos puntos:

• ¿Cómo surge la idea?
• ¿De qué trata la investigación?
• ¿Qué parámetros investigativos se han empleado para el desarrollo? (tipo de investigación y métodos de recolección de datos).
• ¿Por qué se ha realizado la investigación? (motivación).
• ¿Quiénes han participado en la investigación? (y sus roles).
• ¿Qué se quiere demostrar? (y si se ha llegado a algún resultado).

 

Algunas cosas que deberías evitar en la introducción son:

• Dar detalles sobre las conclusiones o explicar todos los resultados (puedes nombrarlos, pero evita ir a profundidad).
• Llenarla de referencias bibliográficas (vale dar una o dos si realmente lo necesitas, pero trata de que esta se componga solo de tus palabras).
• Pasar desapercibido a tu lector (dependiendo del tema y de cómo está hecha la investigación, la introducción es oportuna para dar algunos conceptos bases para comprender tu investigación y punto de vista).

 

3. Construcción de la idea

 

El desarrollo de la idea central y la evolución de la hipótesis son los ejes centrales de la investigación, y que para la introducción vienen a ser protagonistas desde su nacimiento hasta su exploración profunda.

En ese sentido, si te preguntas cómo iniciar un ensayo, debes desarrollar el cómo nace la idea y cómo esta se adapta a una inquietud (hipótesis) que sea relevante para el área de conocimientos en el que realices tu investigación. Puedes explicar algunos hallazgos interesantes que hayas encontrado durante el desarrollo del trabajo y también puedes incluir qué aprendizajes se desprenden de esos procesos.

También si has tenido alguna dificultad en alguna fase, es importante que lo cuentes y puedes incluir cómo los has superado o cómo ello ha cambiado la investigación.

 

 

4. Motivación al lector

 

El punto más importante en todo tu trabajo siempre será mantener al lector interesado en lo que estás explicando, es por eso que debes poner atención en la composición de tu texto para que este sea claro, explique cada una de las etapas correctamente y que se escriba exactamente lo que se espera de esa sección.

Ten en cuenta que para dar una excelente impresión es necesario que evites cualquier error ortográfico, de sintaxis o de sentido. Sugerimos que puedas realizar un par de revisiones sobre el texto (progresivas) y así presentar el mejor contenido posible:

1. Revisa al terminar la sección que desarrolles.
2. Chequea cuando termines la segunda sección para ver cómo es el ritmo de lectura entre una y otra, puede que debas hacer algunos pequeños ajustes.
3. Realiza una revisión final al terminar todo el trabajo, puede que encuentres cosas a incluir que salieron solo durante la redacción del desarrollo o la conclusión.

 

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5. Sugerencias adicionales

 

1. La introducción no debe escribirse de primera, incluso hay quienes la dejan de último. Hazlo según te parezca mejor.
2. No seas rimbombante, usa palabras acordes al contenido y selecciona con precisión los términos que mejor describan lo que deseas comunicar.
3. No le restes importancia a la introducción, muchas personas deciden si leer un contenido o no debido a lo que dice esta sección.
4. A pesar de que debas comentar (por encima) la obtención de resultados y conclusiones, recuerda siempre guardar algunos datos sustanciosos para otras partes del contenido, como cifras, casos particulares y nuevas ideas de investigación que surjan de este trabajo.

 

 

 

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