¿Cómo es un primer trabajo?, ¿qué esperar?

Conseguir nuestro primer trabajo usualmente nos cuesta un poco, nos encontramos con temas como la experiencia requerida, los horarios de trabajo, los uniformes o normas de vestimenta, los reglamentos de la empresa, entre otras cosas, pero esto no debe ser excusa para detener tus sueños, ya que este trabajo puede representar la ayuda que quizá te hace falta para completar el dinero para tu matrícula, reunir para tus gastos mensuales (comida, transportes, libros, fotocopias, etc.), o simplemente la entrada al mundo laboral que tanto ansias.

Pero no te preocupes, en este post te daremos un adelanto sobre qué puedes esperar de un primer trabajo y qué cosas debes considerar frente a este nuevo reto, así que no dejes de leer.

1. Que la empresa entienda que eres estudiante. Comencemos con un punto que debes dejar claro desde la hoja de vida y que también debes hacer notar en el proceso de entrevistas, estás estudiando y por ello el trabajo será un complemento a tu rol como estudiante y no lo principal. Esto es necesario que ambas partes lo tengan claro, así que menciónalo sin miedo, ya que incluso puede que tu horario se flexibilice un poco por el estudio o que puedas llegar más temprano para compensar el tiempo.

1. Horarios. En el mundo empresarial, muchas compañías manejan modelos de horarios fijos para toda su plantilla de empleados, por lo que debes revisar que esto no afecte tus clases. También hay empresas que trabajan mayoritariamente con estudiantes universitarios y que entienden mucho más estas situaciones, o también las hay donde no es necesario cumplir un horario, sino que el trabajo se maneja por metas y objetivos, lo cual requiere un alto compromiso y mucha organización para no generar un sobreesfuerzo y que quedes exhausto o con poco tiempo para estudiar.

1. Compañeros de trabajo. Dependiendo del área en la que comiences a laborar, te encontrarás con personas que ya llevan allí cierto tiempo, por lo que trabajarás directamente con ellas en algunos procesos, en estos casos será bueno que mantengas siempre una actitud amable y dispuesta a aprender. Además, intenta llevar contigo un cuaderno para tomar apuntes, dudas y otras cosas que te ayuden a sacar los procesos adelante, también anota los nombres y los cargos de tus compañeros en caso de que no tengas buena memoria. Ten en cuenta que ellos son diferentes a tus amigos de universidad y tus profesores, por lo que ser respetuoso y mantener una activa escucha son buenas cualidades para este ambiente.

1. Normativas. Todas las empresas tienen códigos de trabajo por los cuales uno debe regirse, estos suelen ir desde las horas de llegada y salida, las jerarquías, los protocolos de emergencia, los códigos de vestimenta, entre otros. Estas normas reflejan los valores internos de las organizaciones y fijan las reglas de conducta y los protocolos de atención para la mayoría de las situaciones que se puedan presentar, por ejemplo: indican cómo los empleados pueden realizar solicitudes dentro de la empresa, cuáles son las formas o los canales de comunicación establecidos internamente, cómo se realizan los llamados de atención y muchos otros particulares.

Recuerda que siempre debes leerlos antes de ingresar y preguntar todo lo que te genere curiosidad, dado que puede que haya una prohibición y que los hombres no puedan tener barba o que todos deban ir en traje formal, por poner un ejemplo.

1. Funciones. Quizá nos dejamos deslumbrar un poco por la gran cantidad de procesos que se llevan a cabo por los diferentes departamentos en una empresa, pero es importante que desde un comienzo tengas claras las funciones que desarrollarás y hasta dónde son tus alcances, qué debes hacer y qué no. También, pregunta si debes usar algún software específico, si existe una curva de aprendizaje y si contarás con alguien que te enseñe o si debes hacerlo por tu cuenta. En fin, aprender puede ser la parte más emocionante de un trabajo y, con el tiempo, verás como te conviertes en una persona de rápido aprendizaje y adaptación.

1. Evaluaciones. En cada trabajo existen parámetros para medir la efectividad de nuestras acciones del día a día, estas evaluaciones varían en el tiempo en el que se realizan y tienen diferentes tipos de calificaciones, puede que te den recomendaciones para mejorar, que indiquen en sí una tabla de puntaje en el servicio que estás prestando o que sea una evaluación personal que no te dé indicadores directos como una retroalimentación, sino que sean datos para la empresa. Sea cual sea la forma en como te evalúen, recuerda que esto es parte normal del trabajo, evita ponerte nervioso y mantén una actitud siempre dispuesta a mejorar.

1. Contratos y vinculaciones. En los contratos legales se colocan todas las cláusulas que especifican tus condiciones de trabajo, en estas aparecen todo lo que acuerden contigo y es sumamente importante que tú leas y revises las condiciones que allí se especifican, te recomendamos que al momento de firmar tomes tu tiempo y no te apresures. Además, recuerda preguntar bien sobre las vinculaciones a los servicios de salud, pensiones y otros que formen parte de la seguridad social, de todo esto deben proveerte con una copia para que guardes en tus archivos personales.

1. Varios. Hay muchos detalles pequeños que son más del día a día, como los útiles que usarás en tu trabajo, los horarios para almorzar, el uso del carnet empresarial, tu lugar de trabajo y demás, todos estos datos los irás compartiendo con tus compañeros de trabajo y con tu jefe directo.

Sumergirse en la cultura corporativa y poder triunfar requiere de paciencia y mucho aprendizaje, por lo que no recomendamos que esperes hacerlo todo excelente a la primera, sino más bien tener esa claridad de que poco a poco irás mejorando en los procesos que realices hasta convertirte en esa persona guía que enseñe a los próximos en llegar.

¿Y tú, ya tuviste tu primer día laboral?, ¿cómo te fue? Compártenos tu experiencia en los comentarios abajo o a través de nuestras redes sociales y no olvides usar el hashtag #BlogModoU.